sintiendo el látigo de doma

Tal como lo predijiste M (ñauuu Amo te keyooo) : ya no quedan sino recuerdos de las huellitas del látigo de doma en mi piel, ... las fotografié hasta que desaparecieron . Me declaro fetichista de las rayas ... (varios tipos de rayas de hecho) En mi mente todavía están vividas las sensaciones que se relacionan con lo vivenciado bajo tus caricias... Y ya que dijiste que les contara en el grupo cómo fui sintiendo el látigo de doma, acá van mis palabras = Primero que nada está el asunto visual, ver una obra de artesania impecable, hermosamente manufacturada, de finos detalles y olor limpio a cuero genuino. Además me lo regalas, se añade a la colección, se transforma en otro símbolo de lo nuestro Luego es la textura, tocarlo, acariciar el mango y también la parte golpeadora, hacerme la idea en la palma de la mano de cómo se sentiría despues en mi "detrasito" ... sabía bien que no sólo estaba destinado a mis nalgas, sino a envolverme desde la espalda a los costados que abundan en mi redonda palidez Finalmente se ponen en juego los asuntos más emocionales; la tentación de ponerme más en actitud sexy... morder el cuero, gruñir cual gatita en celo. O portarme disciplinada, sumisa hasta la médula, entregada en respetuosa y gozosa reverencia solicitando los azotes de mi dueño. O de escapar traviesamente pilucha con el nuevo juguete y ganarme un nuevo castigo. Incluso armar un berrinche infantil con puchero para muy brevemente negarte el privilegio de probarlo cuando tu quisieras. En cualquier caso, se trata de fuertes deseos ebullentes dentro en mis entrañas, pulsaciones aceleradas, efervecencia húmeda en ciertas zonas. Los "tiras y aflojas" de mi multi-funcionalidad, entre la spankee y la esclavita ... y a veces también la switch que diablescamente me susurra perversidades impracticables jejeje El tema del dolor se suma a la ecuación, hago cálculos cruzados entre recuerdos y aproximaciones de lo que podría ser el impacto próximo a venir. Me preparo, trato de relajar las blanduras y de concentrarme en mantener la posición cuando empieces. Conviene que sea asi, pues corremos menos riesgo de error. Me hablas con dulzura y autoridad. Esa mezcla que es única en ti, esa comunicación tan rica, tan especial, tan cómplice. Estoy fuera de forma y mis pensamientos ardientes no ayudan mucho a calmar tanto el anhelo como el sustito... y también considero la posibilidad de que mientras me pegas te acuerdes de cobrarme por lo de haber fumado, por las faltitas antes del viaje y por todas las veces que actuo atrevida, te pellizco el poto o saco la lengua Tomas el látigo, la tembladera de tripas y la agitación de cuchara (corazón) llega al punto máximo. Seleccionas dónde y cómo me toca la inminente paliza... no estoy segura de si oí bien, nerviosamente dudo entre obedecer con mi feliz sonrisa o desobedecer roleramente con carcajada kender. Previo al ¡ZWACK! respiro y dejo fluir esa sensación de pertenencia, esa delicada magia que nos une en algo casi sagrado, propio de ti. El ruido incitante corta el aire, también mi aliento... luego el golpe aterriza en la carne, la marca, la llena de tu energía. Dominas el ambiente con intrincadas curvas de viento, percibo la velocidad, la vibración en la ruta hasta mi; en milesimas de segundo mi epidermis recibe tus hábiles señales, enrrojeciendome. Mis mejillas cambian de color, sudo, me estremesco, gimo. Espalda y glúteos se sacuden reclamando atención... yo no distingo si quieren mimitos o latigazos, en el silencio de respiraciones entrecortadas está todo mi cuerpo expuesto y expectante, tuyo entero para tu placer. Mi gozo es que seas mi dueño, pero además tengo la confianza de que estás dedicando tu mejor esfuerzo para darme alegrías, alentar lo bueno en mi y cuidarme doquiera que vaya. El cuero de vaca y el cuero humano se funden, el excitante sufrimiento de las líneas que surcan mi posterior semeja al de una ramita de ciruelo verde, mi favorita. Me arqueo involuntariamente, quizas es mi goloso culo buscando ganarse el premio mayor. El equilibrio justo entre golpe y corte: una saboreable receta que añade un toque de canne spankee y una pisca BDSM de látigo trenzado al menú que M cocina entusiastamente...entre el chasquido sonoro y el aterrizaje explosivo, más mis quejidos. Disfruto chillando un poquito, corcoveando ansiosa... de más. por ahora... no podría agregar mayor descripción. Corro peligro de tener un orgasmo en la computadora... rams de M spankee y esclavita Amo te amo, M : eres maravilloso, sonrisa de paz, cálido aún en sueños http://mx.groups.yahoo.com/group/Spank_Chile/