diciembre 05, 2012

Droo en la Isla Spankoa


(relato conjunto generado en un grupo llamado “La Isla Spankoa” de facebook, con permiso del co-autor Raymond II)

Había una vez una isla llena de arboles escalables y frondosos, de pozas calentitas con agua termal, de seres misteriosos que soñaban con aventuras espectaCULARES...
Una noche -en que la mayoría de los habitantes estaban relajaditos en sus chozas de techo de paja, y unas cuantas parejas compartían las delicias de las burbujas tibias bajo la luz de la luna- se oyó un maullido largo, prolongado en el viento, que se repetía una y otra vez retumbando cada vez mas fuerte. Era como un llamado, muchos miaus respondieron, patitas en estampida pasaban por sobre los cuerpos de los que estaban acostados, felinos más grandes chapoteaban en las orillas de las termas. Una revolución de colitas corria y trepaba de rama en rama.
Se llevó a cabo una reunion nocturna en el centro de la isla y Droo en med
io de todos los peludos amiguitos: les habló en su lengua, ellos se sonrieron y relamieron los bigotes, el pacto se selló con un ronrroneo intenso.
La gente escuchó que el ruido había cesado, e inocentemente creyeron que la noche volveria a la normalidad. Pero ese no era el plan... jijijiji...
Los escurridizos y sagaces complices de Droo incursionaron en todos los recovecos de las viviendas, robando descaradamente todo instrumento que sirviera para nalguear.
Los dueños trataban de recuperar sus pertenencias pero los gatos eran muchos, estaban motivados y sin duda tenian mas destreza que cualquer bipedo medio adormilado. Para el amanecer habían sido secuestrados más de 80 cepillos, unas 30 paletas de tenis de playa, muchas reglas, correas, zapatillas, cucharas y variopintas curiosidades que los felinos habian considerado peligrosas para la epidermis traseril de quien se portara mal.
Droo tenia encendida una gran fogata, y quemaba todo lo que ellos le traian, dandoles como recompensa pescados de la reserva de los isleños, porque Droo estaba aburrida de comer sanito y sabía que tendrían que dedicar esfuerzo y tiempo en pescar en vez de en fabricar nuevo armamento para zurrar culitos culpables

Entonces, junto con la salida del sol, el aroma a humo y la escencia de pescado descongelado "perfumó" el ambiente. Muchos gatos felices se retiraban a sus hogares, sin embargo, los humanos...

(aca cada uno cuenta que hace al darse cuenta de la situación, y yo Droo se supone que estare haciendo "la danza de la travesura lograda" alrededor de las llamas que queman las cosas MUAHAHAHAHAAAAA ) =^^=  26 de octubre a la(s) 23:22
Raymond II (escribió)  Estaba yo durmiendo plácidamente, cuando un gran clamor y unos fuertes toquidos en la puerta de mi choza prefabricada de interés social me despertaron, me levante a abrir la puerta y enseguida me dijeron –nos han robado, todos nuestros instrumentos y juguetes han sido sustraídos y destruidos, algunos tenían generaciones en la familia, los construyeron nuestros tatarabuelos, exigimos un castigo ejemplar para el culpable, muerte en el volcán, pero antes que le corten las manos, clamaban los más extremos, azotes y encierro perpetuo en la mazmorra clamaban los más moderados, calma les dije, si se trata de un hurto, mejor vallan con la policía, entonces dijeron, la policía solo cuida los casinos y los turistas ricos, además tú tienes la obligación moral de ayudarnos, así que resuelve este caso. Se retiraron y me dejaron solo con el problema, entonces exclame, solo acuden al rey cuando tienen problemas, pero cuando les va bien, no vienen a verme para compartir su bienestar, es duro ser rey, pero lo tomare como un reto y saldré exitoso, debo aclarar que como en toda monarquía constitucional moderna, mi autoridad es únicamente simbólica, el primer ministro se encarga del gobierno, y en vista de que la isla es un paraíso fiscal y nadie paga impuestos no me toca nada, así que tengo que ganarme la vida como el resto de los isleños, afortunadamente hay muchos cocos, así que no paso hambre, aunque la dieta es un poco monótona, además no falta el turista que desee tomarse una foto con el rey y me dé una pequeña compensación, así como el que quiera estar en una cena real, aunque la tenga que pagar el, resolver estos ocasionales problemas me dificulta un poco la vida, pero también me quita el tedio, bien, pues por donde empezare mi investigación, es la primera vez que tendré que realizar un trabajo detectivesco, tal vez debí leer más libros policiacos en mi juventud, ya se lo que hare, iré directamente a la agencia central de inteligencia isleña, la que todo lo sabe, todo lo ve, también es conocida como el “BAR de Manolo”, dicho esto me arregle, y poniéndome mi sombrero de picos, que en otros lados es conocido como corona, me dirigí hacia allí. Después de dar un abono a mi cuenta y disfrutando de un espléndido ron importado de la isla vecina, le pedí a Manolo que me pusiera al tanto, pues es complicado me dijo, una manada de felinos movida por un misterioso poder robo todo, lo encontraron destruido en una hoguera no hay más pistas, es todo un misterio, nadie tiene idea de quien pudo haber sido, algunos suponen que pudo ser un discípulo de Cesar Millán, el encantador de perros, quizás fracaso con los perros, pero triunfo con los gatos, otros suponen que solo pudieron ser extraterrestres los que lo hicieron, ya que no es posible que un terrícola pueda controlar a los felinos, pero la mayoría supone que fueron unos turistas, en ese caso no podemos hacerles nada, solo pedirles que paguen los daños, pero primero hay que encontrarlos, lo que creo poco probable, pero no pierdes mucho con intentarlo, así pues, después de haber recibido este alentador parte de inteligencia de Manolo, termine mi ron y partí hacia el lugar donde estaba la hoguera donde fueron incinerados los objetos, al arribar me di cuenta de que había una gran cantidad de huellas de felinos de todos los tamaños, así pues pensé, alguna me ha de llevar a su líder humano, si es que es humano, si no, pues que el dios volcán me proteja, empecé a seguir el rastro de huellas, uno me llevo a lo alto de un árbol, cuando me di cuenta y quise bajar, me resbale y caí en un arbusto espinoso, otro rastro me llevo al borde de un estanque que estaba muy resbaloso, tropecé y caí al agua, otro me llevo a un patio donde había un perro bravo que me mordió el pantalón y me obligo a subir a un árbol hasta que el dueño llego y se lo llevo, tuve varios otros tropiezos, termine el día con la ropa deshecha, el cuerpo magullado y mucho cansancio, decidí irme a casa, en el camino de regreso me encontré a Droo, paseando con su minino mascota, me detuve a charlar y le dije, estoy investigando quien hurto y destruyo los instrumentos, quien crees que pudo hacerlo, no tengo idea, me contesto, pero ha de ser muy travieso, si, le dije, pero esas travesuras se pagan con azotes atados a la palmera mayor, ya vera cuando lo encuentre, que tenga suerte me dijo, nos despedimos y fui a tomar una merecida cena y un descanso, mañana será otro día. (continuara) .. Droo, aqui puedes seguir tu relato para ver como la hago de Sherlock Holmes isleño :)1 de noviembre a la(s) 23:21 
Droo (escribió) Dro quedó muy inquieta de su encuentro con el rey. Lo de estar atada y azotada a la palmera mayor le parecía terriblemente aterrador, nada parecido a lo que había imaginado como respuesta a su provocación a los habitantes spankers en la tranquila isla... Se puso a investigar lo que decia la gente. Lo de la palmera era feo, pero aún más espantoso parecía ser el remedio que sugerian los comentarios de otros isleños, que consideraban un crimen poco menos que capital la quema de las cosas para spankear, hasta hablaban de quemar al culpable en el volcan. Además, con pánico en la mente y las tripas revueltas de miedo se enteró que pensaban algunos en castigos horribles como amputarle sus manos. Si morir por una travesura era algo casi insoportable, la idea de que ella y sus amiguitos felinos perdieran las manitas era simplemente una locura, preferiría estar en la tumba. Por eso no lograba conciliar el sueño. Y tomó una decisión trascendental: se arriesgó a reunirse de noche con los lideres gatunos (con los que se comunicaba por maullidos en sus idiomas) y les explico brevemente que corrian riesgo de ser atacados y perder sus garritas por un desquiciamiento de los humanos. Les ofreció como escondite una suite de las que usaban los turistas, que pagaría ella en un lugar seguro alejado de la gente que quisiera dañarlos, el deposito en línea ya habia sido hecho con todos los fondos que Dro conservaba para su vejez y por si lograba estudiar algo de provecho. Algunos accedieron, otros prometieron tener cuidado pero preferian su libertad. Ella sabiendose a punto de perder la vida, sólo conservó lo justo para ir a dar a un hospital si es que despues de la "venganza" de los afectados conservaba el isntinto de supervivencia en vez de dejarse desangrar falleciendo como era de esperarse según la historia de las azotainas publicas estilo Inglaterra de Enrrique octavo. A medianoche, turbada y amargada, con esa calma previa al intento de suicidio, se acercó a la vivienda del rey y le dejó una carta en la puerta. "Rey Raymond II : cuando planié lo de robar las cosas malas que duelen en el trasero cuando nos portamos mal fue nada más para ver si había más diversión en la isla. Me parecía que sólo los turistas estaban divirtiendose y crei que una travesura iba a poner más acción... sin embargo creo que fue un error de criterio quemarlas ahora que me di cuenta que eran tan valiosas como una vida para los isleños mas tradicionalistas. No culpen por favor a los felinos, yo los convenci con pescado porque no me gusta que me obliguen a comer sano, pero ellos no merecen ningun castigo. Yo aceptare toda la responsabilidad, y el juicio que corresponda antes de mi condena. Siento tampoco es justo que el rey de nosotros tenga que hacer trabajos indignos de su cargo y honor (como un policia sin paga ni placa ni arma ni refuerzos), por eso le pido si es posible que vaya con un grupito a detenerme en la mañana. Y por si me he arrepentido y me vuelvo cobarde, lleven cuerdas. Tomare leche tibia para tratar de descanzar antes de que llegue mi hora final. Siento haberle mentido cuando me preguntó antes, a veces mi conducta es tan infantil que nadie creería que casi tengo 40. En fin, ya veo que no llegare a los treintainueve. Un respetuoso saludo reverencial por escrito, ya que en persona posiblemente me rebele a lo que estoy ahora diciendo en la carta. Dejo mi huella entintada para que no se dude que he escrito aparte de mi firma y mi dirección. atentamente a usted, con mis sinceras disculpas. Dro". Cabisbaja, arrastrando los pies, dio la vuelta en la oscuridad y empezó a caminar lentamente hacia su casa. 4 de noviembre a la(s) 0:17 
Raymond II (escribió) Al despertarme por la mañana encontré la carta de Droo, después de leerla y tomar el desayuno me dirigí a su choza para tener una retroalimentación positiva con ella (regaño y castigo), llegue y toque, cuando me abrió le dije lo siguiente:
No me digas una solo palabra Droo, he leído tu carta, estoy asombrado, como fuiste capaz de hacer eso, el asombro no es por la travesura eso es normal en ti, pero dominar a los felinos, eso sí que es difícil de creer, pero estas de acuerdo que lo que hiciste es una mala acción, aquí y en todas partes, el robo es malo en cualquier lugar, y no se diga el daño en propiedad ajena, si solo no hubieras destruido los instrumentos, habría pasado por una broma, estaríamos riendo ahora, unas palmaditas y un rato en el rincón y todo solucionado, pero la cosa es grave, tienes un punto a tu favor, tu confesión voluntaria y sin que hayamos tenido que torturarte habla a tu favor, claro, habrá quienes de todos te quieran torturar, solo para no perder la costumbre, pero yo me opondré ya que has sido muy valiente, me agrada tu actitud, mereces clemencia, abogare por ti y te perdonaran, te salvaras de ser atada a la palmera y azotada, pero no de estar sobre mis rodillas, voy a considerar tu falta como la de una niña traviesa, obtendrás el perdón, pero tendrás que cumplir la penitencia, veamos, que dice la regla para las niñas traviesas, treinta azotes por cada diez años de edad o fracción, te tocan ciento veinte, los recibirás en dos sesiones, la primera será de veinte te los daré con la mano sobre mis rodillas, para que tu trasero quede caliente, y los cien restantes te los dará una persona de tu confianza, un amigo o amiga, alguien que se interese por tu bienestar y corrección, que le agrade que seas una persona de provecho, usara el instrumento o instrumentos apropiados a la falta, puede que tengas dificultad en encontrar algo, ya que causaste una gran destrucción, pero siempre hay ramas de árbol que se pueden cortar y limpiar, pedazos de madera y cuero abandonados, tal vez alguien conserve su cinturón, debo enfatizar que de lo apropiado de este castigo dependerá el perdón de los isleños, después de terminado deberás escribir un detallado relato del mismo para que se publique en la gaceta de la isla, además iras todos los días con el carpintero para ayudarle a fabricar instrumentos hasta reponer los destruidos, tu castigo lo recibirás en la plaza por la tarde, dentro de tres días, preséntate con una falda corta y sin bragas, nadie ira por ti, es importante para tu perdón que te presentes voluntariamente, está de más decirte que si no lo haces así, el castigo será más severo, además de que te retiraremos la palabra y marginaremos para siempre, empieza pues a buscar los medios para cumplir tu penitencia, así podremos terminar este negro capítulo de la historia isleña.
Después de haber dicho esto a Droo, me dirigí a la plaza a hablar con los demás, la mayoría estuvieron de acuerdo con mi decisión, así organizamos un comité para construir un templete para que todos pudieran observar el castigo, pondríamos una silla, así podría ser sobre las rodillas como me tocaría a mí, y una mesa que podría usar el spanker de Droo, si lo creía conveniente, cuando todo estuvo dispuesto, nos retiramos hasta el día del castigo.
(Aquí continuas con lo que sentiste durante el regaño y la descripción de tu castigo para publicar en la gaceta de la isla) 8 de noviembre a la(s) 22:29 · 


Escrito en el diario de vida de Droo : 17-11-2012
Cuando el rey me contó que no iban a matarme de la forma atroz para la que me había estado preparando, (y por ende no iban tomar venganza de mis amigos gatitos) sentí un gran alivio. Respiré con el pecho relajado y la mente libre de pánico, al mismo tiempo que me cosquilleaban los glúteos y tragaba saliva.
Su regaño me avergonzaba, pero tenía razón. Yo me había comportado de muy mala manera y merecía el castigo que me dieran, además… era precisamente del tipo que se necesitaba para ser perdonada (y aprender a perdonarme a mi misma). Al fin y al cabo había hecho una chiquillada y como tal correspondía que me tratasen.

Las 20 palmadas a poto pelado, en público, van a ser humillantes; supongo que no tan dolorosas a pesar de no conocer la mano de nuestro Rey. Mi travesura fue orientada a provocar una zurra, y tener el honor de recibirla del líder de la isla casi parece un premio. Ojala que después me conceda servir a la comunidad para compensarle haberme salvado la vida, capaz si tengo un trabajo me entretendré menos en portarme como una niña.

Lo de trabajar con el carpintero me esta siendo un gran esfuerzo, mis manos se astillan y me la paso con sueños en que las nuevas armas son estrenadas próximamente, en mi trasero desnudo. A veces me quedo metida en las sábanas hasta tarde y llego atrasada a cumplir con mis deberes, él me mira fijo y apunta en una libretita roja con gesto ceñudo. Temo que tendré que encontrar el modo de justificarme para evitar que el asunto concluya con mis pompas rojas sirviendo de muñeca de pruebas para paletas o reglas o algo peor, creo que vi retazos de cuero en el taller.

Al día siguiente de hablar con el rey, fui al hotel a contarle a los felinos las buenas nuevas. La mayoría se alegró, salvo unas cuantas mamitas embarazadas que me explicaron que se habían arreglado para dar a luz ahí y conservar a la familia gatuna con una situación privilegiada. No tuve corazón para recular mis propósitos o recuperar mi dinero, era lo menos que podía hacer por ellos luego de arriesgarlos a tanto.
Con un gran poder viene una gran responsabilidad dice el Hombre Araña ¿ por qué diablos usé mi comunicación a maullidos para meterlos a ellos y a mi en líos ?. Ahora no tengo fondos para llegar a anciana, a penas unos cuantos pesos para pasar el resto del año. Tras el castigo tengo qué buscar en que laborar.

Sin embargo, aunque me quedé tranquila la primera semana, tuve que recordar que la penitencia incluía 100 azotes más y la participación de otra persona ¡ de mi confianza ! . Significaba para mi acercarme a cierto spanker, uno que ya me conociera, confesarle mi culpa y solicitarle que me pegará delante de todos en la isla.
Desde el primer momento supe que eso se me iba a dificultar, no dudaba que previa la fecha de subir al escenario preparado me llevaría de su parte alguna clase de escarmiento por mi reincidencia en esta clase de diabluras.
Así sucedió hace poquito y por eso es que recién “me siento” a escribir aquí en mi diario. No puedo quejarme, tenía bastantes deudas con él y me indultó varias indisciplinas pasadas. Todavía no sé qué más me hará … GULP!

(es un avance, falta lo del spanker que se decida … y de ahí escribiré lo del castigo recibido. Por mientras si quieren escriben lo de la construcción, o lo que hace el carpintero o alguna otra línea de acción. Sorry por la demora)17 de noviembre a la(s) 23:33
Raymond II (escribió)  Como Droo se tarda un poco en continuar su relato, deseo poner un comentario, se menciona al spanker y spankees, pero alguna vez se menciona a el espectador, puede que la mayoría de los castigos sean en privado, pero cabe la posibilidad de que alguna vez se invite a alguien a que asista como espectador, sé que en algunas fiestas y reuniones se dan castigos en público, pero quizás no sean tan severos como los privados, sin embargo pienso que sería un gran honor el ser invitado a uno privado como mirón, las expectativas previas serían muy emocionantes, como aplica esto a este relato, pues que también es emocionante esperar el castigo de Droo, claro aquí es público, pero sería interesante que en la vida real el spanker de Droo lo aplicara y tuviera la posibilidad de verlo, así pues, que están comentando los isleños en el día previo, me imagino lo siguiente:
Estamos reunidos en la agencia central de inteligencia isleña, el Bar de Manolo, degustando un buen ron y charlando, -Bueno Rey, se acerca la hora del castigo de Droo, crees que hulla o que se presente me preguntaron. Les conteste, estoy seguro de que vendrá, no creo que quiera que la marginemos, sé que el castigo más severo no la atemoriza tanto como eso, pero, me imagino que su spanker será severo con ella, todavía no lo conozco, pero me han dado referencias de que es un buen corrector, quizás hasta tenga algún instrumento escondido que no fue destruido, solo puedo especular, espero que sí dijo otro, mi cepillo de pelo tenía en la familia desde mi tatarabuelo, lo extraño mucho, espero que use una tira de cuero duro, de las que dejan una buena marca, pues yo opino que debe usar una vara gruesa, después de eso, no le quedaran ganas de ser traviesa otra vez, si, dije yo, me gustaría que con el castigo se corrigiera, pero ya saben cómo es, se porta bien por un tiempo y luego vuelve a las andadas, pero en realidad, a todos nos gusta que sea así, si se portara bien siempre, la isla sería un lugar muy monótono, lo que a mí me agrada, digo otro de los parroquianos, es que el castigo sea público, así podremos contemplar su trasero rojo y estar seguros de que pago su falta, me dolió mucho perder mi regla, además de instrumento de castigo la usaba para mi trabajo, me costó conseguir otra, además de atrasarme en mi labor, espero que su trasero le duela igual, así se fueron suscitando más comentarios del mismo tono, todos estábamos interesados en ver como pagaba Droo sus culpas, y nos comía la curiosidad, lo bueno es que ya falta poco, hay que tener paciencia, diciendo esto brindamos por última vez y nos retiramos.

Droo escribió : (30-11-12) Querido Diario : estas semanas ha sido difícil poder concentrarme en escribir. Dediqué casi todos mis ratos libres en masajes con cremita y ejercicios nalgares … después de la sorpresiva visita de “el Koala” al taller del carpintero. El spanker que me indultó las indisciplinas del pasado, no perdonó ni una sola de las faltas que estaban apuntadas en la libretita del artesano. Ni corto ni perezoso le dio uso a paletas, cepillos, reglas, y hasta ayudó a diseñar algun flogger, tawse y un temible látigo, que obviamente se estrenaron en mi. Tuve que esforzarme por tener conducta ejemplar desde entonces y aunque me he demorado en hacer cada cosa bien, ya lo estoy logrando en la cuenta regresiva mientras veo como progresa la construcción del templete en que me tocará estar a culito descubierto.

Y es que ya queda poco para el día en que subiré al escenario, luego a las rodillas del rey. ¡Que nervios! Menos mal mis pompis ya han recuperado un color rosa decentito y tengo preparada una falda estilo polinesico tejida de flores. Debería ser cortita pero prefiero tapar mis vergüenzas delanteras, si total las traseras van a quedar igual expuestas… por último el rey hace de jardinero y poda algunas para que quede la prenda a la altura correspondiente. Gulp! Tengo un sustito metido en la panza que es entre beneficioso y desagradable, entre merecido y morboso.
Sin embargo, tengo un cierto orgullo de saber que mis palabras serán publicadas en la gaceta de la isla. Aunque sea relatando cómo me llegó el castigo. Puedo adelantarme a pensar en los 100 repartidos en 30 del flogger creado conjuntamente con el carpintero, 30 de la fusta que le gustó tantisimo aplicarme y que se salvó del robo y la quema, 30 con la palmeta rectangular con agujeros que estuve puliendo con lija y 10 sorpresa … que me temo le pregunte al público sus preferencias.
En fin, mejor sigo practicando para tener glúteos olímpicos, resistentes y mostrables ;)

3y 4 de diciembre de 2012 escrito por Droo
Relato del Castigo Público de la penitenciada Droo para la Gaceta de la Isla Spankoa.
En determinación judicial monarquica por el robo y destrucción de los instrumentos spankos personales e históricos de la población, sentenciada a: 20 nalgadas a mano en las rodillas del Rey Raymond II y 100 azotes del spanker de su confianza Endimion
Al dar por terminado mi trabajo forzado con el carpintero para re-hacer el acervo azotófilo de la isla, fue fijada la fecha y hora de la ejecución de la zurra que sabía me merecí con creces. Ese día fui escoltada por Endimion quien tras saludar a su majestad, se acomodó a la izquierda en el escenario para esperar su turno en zurrarme. Cuando llegué a lo alto templete construído con tal propósito, me di cuenta que la multitud miraba alternativamente mi rostro y los instrumentos exhibidos, pues incluso había un arcón desde el que se repartirían reposiciones a los afectados con mi crimen. Iba vestida con una falda de flores tejidas entre si, que me llegaba a la rodilla. El Rey señaló que el largo de mi ropa no era el que había mandado y a lo que el spanker respondió declarando que eso agravaba la falta, razón por la cual pedía se le permitiera incrementar la pena al finalizar lo ya previsto. Luego sacó de su mochila una tijera e invitó al soberano a hacer el recorte pertinente a la prenda, comprobandose así que yo había al menos cumplido en lo de no llevar ropa interior. El Rey accedió al petitorio, a condición de que la sanción fuese aplicada sólo en mis nalgas descubiertas. El público daba voces ora de burla ora sugiriendo el uso de un determinado elemento - no era un momento solemne como yo había imaginado - pero la sonrisa del spanker y la amabilidad que tuvo nuestro líder al salvarme la vida me daban el valor necesario para aceptar sin rebeldías la purga por venir.
Un arlequín puso en el centro una silla ornamentada como trono, en la que el rey se dispuso a dar curso al OTK; palmeándose los muslos me dio la señal de asumir mi posición. Me recosté con cierta vergüenza dado que percibía las caras de entusiasmo al contemplar lo no tan blanco de mi atrasito. Una mano firme y viril se posó en mi cintura, la otra eliminó el resto de las flores posteriores, dejandome sin opción de cubrir mi futura rojez.
¿Preparada Droo? – preguntó el rey
Sipi, … digo, si señor – respondí tragando saliva
Entonces su palma derecha se estrelló en mi gluteo izquierdo (a intervalos de 3 segundos) por 10 veces. Sentí latir la zona afectada, inhale y exhalé justo a tiempo para la segunda andanada, ahora en el lado derecho. Ni siquiera alcanzé a patalear, el susto y la rapidez me quitaron el aliento.
- ¡ No los contó ! – reclamó un fulano de la concurrencia
- Debes dar las gracias también, después de cada una de las nalgadas, traviesa – me recordó paternalmente el rey – solamente será válido este procedimiento si llegas hasta el 20 enumerando los golpes que recibes y si no te cubres, sino empezaré de nuevo desde el inicio.
Aguanté 17 potentes y veloces palmazos del mismo modo, pero pronunciando “uno gracias por esta lección a usted mi rey y perdón al pueblo de la isla”,  “dos gracias por esta lección a usted mi rey y perdón al pueblo de la isla”, “tres gracias por esta lección a usted mi rey y perdón al pueblo de la isla” … etcétera. Desgraciadamente en el 18 casi instintivamente me tapé y por eso me gané la tercera ronda, con las muñecas sujetas en mi coxis y gritando claramente tanto la frase como la cifra.
Se me prohibió sobarme, aunque los dedos de nuestro monarca pasaron aceite de coco de palmera en mi ardido culo. No supe si él estaba enterado que aquello me haría aún más dolorosa la continuación, la paliza de 100 otorgada por Endimion, que ya me había instruido acerca de cómo colocarme: panza en la mesa, piernas abiertas, brazos afirmados bajo mis pechos, y evidentemente declamar cada número.
Primero fueron los 30 de palmeta, por la pantalla gigante pude comprobar que mi salva sea la parte se pintaba de rojo con pedazos circulares más claros, que representaban los agujeros de la paleta de madera. Imposible evitar chillar y recoger las piernas, manteniendo eso si mi ubicación. De ahí con precisión milimétrica emparejó el tono de mi piel con la fusta, repasando cada espacio faltante durante los 30 fustazos que me mordían la carne junto a la raja. Los treinta del flogger los presentó como un espectáculo de destreza, enarbolando las tiras de cuero y chasquéandola en el aire, generando asi una ola de aplausos entre los asistentes, tuvo tanto éxito que mis apagados quejidos no se oyeron, a pesar de que el fino oído de él se aseguró de que yo completara las debidas palabras aún entre ayyes y auches.
- En los últimos 10 utilizaré la tecnología – anunció Endimion doblando sus audifonos de celular por la mitad – y en los que Droo tiene pendientes por pasarse de lista con ropa a su regalado gusto, quiero que todos participen votando por sus “favoritos” – agregó señalando el baúl, desde el que un par de asistentes distribuyeron ordenadamente mucho de lo fabricado en el taller.
Los azotes con cable me parecieron fuego arrasando horizontalmente mi epidermis.
Hubo una pausa, me acomodaron arrodillada en la silla con los codos en el respaldo. La música inundó el lugar, a modo de ambientación de fondo, para la lectura del conteo del plesbicito que condenó mis hemisferios redondos a una lluvia de varazos, cepillazos y correazos.
No hay obligación de que digas ni una palabra,  spankee mal portada – me advirtió el spanker – te voy a pegar durante toda una canción, llora si quieres pero nada te salvará
Yo no lloro – repliqué con un poquitito de orgulló – y me sometí a la azotaina
 Endimion fue intercalando la correa, la vara de abedul y el cepillo ovalado. El calor, el picor, la sensación de machucado crecían y crecían, se me hizo eterno el tema en japones que se escuchaba por los parlantes. Por poco me caigo de tanto apretujarme y balancearme con los impactos en mi. Cuando sobrevino el silencio respiré, feliz, agitada y tal vez excitada, más que nada contenta de que creía ya había acabado el suplicio. Sin embargo, mi spanker de confianza tenía preparada una sorpresa.
Señor Raymond II, Rey de la Isla Spankoa. La comunidad me informó que usted perdío en el crimen cometido por esta señorita, su regla de trabajo. Le he traido una especial, desde el continente, que esta recubierta de una pelicula anti-inflamable y cuyo material base es madera de ciruelo verde, una de las mejores cepas para spankear chicas de pésima conducta como Droo aquí presente. En compensa por las molestias causadas por mi ex pupila, a quien pensé haber logrado domesticar a base de severidad, mi país les regala 30 ciruelos en fase árbol jóven, para ser plantados y utilizados en lo que su majestad disponga. Por favor, haganos el honor de estrenar su nueva regla en el poto de Droo, quien lo ofrendará gustoza y obedientemente agachada ante usted.
Disciplinada y reconociendo el mérito de lo que me ordenaban, apoyé mi cabeza en el suelo frente al rey, quien me atizó no se cuantos reglazos en medio de una ovación popular.
La jornada concluyó con un refrigerio en el Bar de Manolo donde brindaron a la salud del rey y fueron perdonándome entre risas, al notar que ellos podía estar sentaditos y yo seguía de pie con mi colorado posterior a la vista de quien quisiera fotografiarlo, supuestamente por un concurso en este periódico. Endimion tomó su avión esa misma noche.
Yo tardé en escribir la experiencia vivida, porque quería ser sincera con los isleños.
Droo


rams de M

5 comentarios:

  1. Me encanta lo que escribes, y me gusta mucho el spanking y el ageplay... me gusta conocer gente con mis mismos gustos , espero podamos concernos, saludos

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    1. gente con gusto de spanking se comunica en foros, facebook, grupos yahoo y otros blogs. Deje más datos abajo al final de las respuestas de este relato.
      Hay al menos 2 grupos dedicados al spanking en Chile, si tienes interes los publico aca cuando los pidas

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  2. soy de chile y me facina el ageplay... especialmente los vestiditos jeje y soy varon jejeje

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    1. conozco a algunas otras personas que les gusta este tema en Chile
      Hay que tener paciencia eso si para dar con una persona entusiasmada por llevar a la práctica el juego con compatibilidad de edades imaginarias y situaciones ficticias

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  3. hola anonimos que les gusta el ageplay. Aca les dejo el link de un blog enteramente dedicado al ageplay que es de un colega de Argentina http://spankingageplay.blogspot.com/

    Respecto a este relato esta sacado de un grupo de facebook que se llama LA ISLA SPANKOA en el cual pueden comunicarse con gente que gusta de diversos tipos de spaking y tambien B D S M

    además aun funcionan grupos yahoo y por supuesto foros que reunen gustos del mundillo

    en Chile esta http://www.chilenisados.cl/

    muchas gracias por comentar aca en el blog

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